28 de enero de 2011

Escuela Shinbukan - Kuroda Tetsuzan sensei (II)


ENSEÑANZA

En la mayoría de koryū la enseñanza es totalmente delegada y/o dividida entre muchos maestros que han recibido autorización oficial para enseñar, a algunos de los cuales a veces se les permite enseñar sólo una parte determinada del plan de estudios.

Este permiso se concede normalmente a través de un documento, a menudo llamado menkyo kaiden o "licencia de transmisión", que certifica que el titular conoce todo el plan de estudios técnicos que se pueden enseñar o que está cualificado para enseñar, a veces hay "enseñanzas secretas" o okugi que sólo se transmiten de Soke a Soke.

En la Tamiya-Ryu Iaijutsu sin embargo, es inusual que el maestro autorizado sea otro que el propio Soke. Esto significa que para aprender una técnica o kata, hay que aprender directamente de Kuroda Tetsuzan. Esto se da con el fin de preservar las formas originales del kata de la mejor manera posible. Lo mismo es válido para todos los Ryu de que Kuroda Sensei es el Soke.

Sólo hay un dōjō real, el Shinbukan Kuroda Dojo (振武 馆 黒 田 道场) en Saitama.

Kuroda sensei siempre trabaja con cada alumno para transmitir directamente y así después poder trabajar correctamente con tu compañero las sensaciones requeridas en el ejercicio. Es una suerte y honor formar parte de la escuela Shinbukan.




Las katas son transmitidas oralmente, cuidando los detalles, excepto un libro detallado con dibujos y explicaciones que conserva intacto cada detalle y es tan antiguo como la escuela misma.

Entrenados dichos movimientos durante siglos, los samurais desarrollaban habilidades que les permitian sobrevivir en el campo de batalla. Con casco y armadura, estos guerreros podían aguantar muchas horas sin necesidad de pararse. En cambio cualquier deportista de élite actual no duraría ni una hora. ¿Pero cómo lo conseguían?

Practicar de la mano del Soke Kuroda me permite comprender mejor el bujutsu y el kobujutsu. Y me da una visión muy clara y profunda del Aikido. Sus principios y fundamentos.


César de la Cal Díaz de San Martín

No hay comentarios:

Publicar un comentario